¿Cuándo necesito un Aparejador o Arquitecto Técnico?
Situaciones en las que necesitas los servicios de un arquitecto técnico.
Algunos ejemplos de cuándo se necesitan los servicios de un arquitecto técnico.
Tasaciones o valoraciones de inmuebles
Ya sea para entidades bancarias o a título particular, el Arquitecto Técnico es el más capacitado para tasar y/o valorar viviendas.
Proyectos técnicos para apertura de negocios en locales públicos
Para formalizar la licencia de apertura de un negocio (tienda/ bar/ oficinas, etc.) es necesario presentar un proyecto técnico que justifique los requisitos aplicables, en diversas materias.
Certificado de eficiencia energética
Aunque son muchas las titulaciones que pueden redactarlo, sólo el Arquitecto Técnico se erige como especialista en ejecución de obra, por lo que supone una ventaja frente a otros profesionales del campo.
Informes periciales / patológicos
Los informes periciales, o informes sobre patologías son otra rama que los expertos en ejecución de obra pueden redactar.
Proyectos y direcciones de obras
Pequeños proyectos de edificación como porches, almacenes, instalaciones deportivas o naves industriales pueden ser redactados por un Arquitecto Técnico, sin necesidad de contratar un Arquitecto.
Proyectos de derribo
De cualquier naturaleza, ya sea derribo de viviendas o edificaciones de cualquier otro uso. Igualmente con la dirección de la obra del derribo.
Licencias de actividad para espectáculos e instalaciones eventuales
La realización de un concierto, o una feria, o cualquier evento que requiera de una instalación provisional, necesita proyecto de actividad.
Certificados de antigüedad de inmuebles
En ocasiones es necesario certificar la antigüedad de un inmueble por diferentes motivos. En estos casos, también necesitarás un aparejador.
Cédula de habitabilidad de primera y segunda ocupación
Cuando necesitas dar de alta en una vivienda los servicios de suministro de agua o electricidad, necesitarás la cedula de habitabilidad, que certifica la adecuación de la vivienda a unos mínimos de habitabilidad.
Informe de evaluación del edificio
Este informe es preceptivo en inmuebles de más de 50 años de antigüedad, e informa del estado de conservación en el que se encuentra.